Paritarias: Kicillof y CICOP dejan empobrecidos a los trabajadores de la salud

Escribe Juan Pedro Nievas (Hospital Moreno)

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En los próximos días los trabajadores de la salud, médicos bonaerenses, percibirán lo acordado en la última paritaria provincial entre el gobierno y los sindicatos.

La dirección de CICOP, que tiene a Pablo Maciel como presidente, aceptó sin chistar un “aumento” miserable del 7,5%. Con lo acordado, el salario básico quedará en $289.275. Una cifra de indigencia. El resto del salario compuesto por un sinfín de bonificaciones hacen que de bolsillo se llegue a los $703.816. La canasta familiar está valuada por encima del millón de pesos y todavía no se habían contemplado los últimos aumentos en los combustibles y el tarifazo del gas. Los trabajadores de la salud tienen múltiples empleos para llegar a fin de mes.

El procedimiento para la aceptación de la oferta fue un escándalo. El 17 de mayo se realizó el congreso ordinario de CICOP. Este gremio es dirigido por la lista 1+3, alianza que integran el PCR en su presidencia y el MST (FIT-U). Según los estatutos de CICOP, toda propuesta paritaria debe ser aceptada o rechazada en un congreso ordinario por delegados con mandato de asamblea. Si no se realizó asamblea en una seccional, sus delegados no pueden votar. La conducción de CICOP suele convocar a los congresos con 48 o 72 horas de anticipación. Pero en esta ocasión, lo convocó con menos de 24 horas de antelación. Quisieron asegurarse que ninguna seccional discuta la propuesta.

Con este Congreso ultra “express”, la novedad fue que varias seccionales expresaron su desacuerdo y rechazaron la propuesta salarial. Un número importante de delegados manifestaron que los salarios no alcanzan. Al momento de la votación, 53 delegados votaron a favor de la propuesta salarial y 11 la rechazaron. Otros dos se abstuvieron. Nuestra seccional -Hospital de Moreno- rechazó la ´oferta´, respetando el mandato de nuestra asamblea. Algunos delegados ligados al MST también votaron en contra, partiendo a la Comisión Directiva de CICOP, que votó por la aceptación. Al finalizar el Congreso, Pablo Maciel (presidente de la CICOP), ofuscado por las manifestaciones en contra de la aceptación de la propuesta salarial, lanzó un ataque a los delegados. “Luchar contra Axel Kicillof es, para los trabajadores, como pegarse un tiro en los pies”, sentenció. Pero es al revés, el “tiro en los pies” es aceptar la miseria salarial que ofrece el gobernador que replica el ajuste de Milei a nivel provincial.

Los intereses de los trabajadores de la salud son incompatibles con una dirección sindical integrada por completo al Estado.

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