Escribe Daniela Romano
Impulsemos la autoconvocatoria y la huelga general.
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Las mesas paritarias, que según el sindicato ADP y la intergremial continúan "abiertas", han sido en realidad encuentros mensuales entre el gobierno y la burocracia para desmantelar el salario docente. “La provincia liquidó el sueldo de marzo con un incremento del 6 %. También se pagará un 22 % pendiente de la negociación del año pasado" (El Tribuno, 27/3), cuando la inflación del último trimestre fue del doble. El 22 % que el Gobierno aún debe a la docencia se calcula sobre la base del sueldo de diciembre de 2023, es decir, devaluado. Solo este año, la docencia ha sufrido una pérdida salarial del 40 %, mientras que el salario inicial de los docentes no supera los 200.000 pesos y las tarifas de servicios aumentan en un 100 %.
Fernando Mazzone, secretario general de ADP y parte de la burocracia sindical kirchnerista alineada con CTERA, ha declarado que no firmará un acuerdo con el Gobierno hasta que se restituya el Fondo de Incentivo Docente. Esta es una maniobra de distracción, ya que no tiene mandato de las bases y no ha convocado ninguna acción para rebelarse contra la eliminación del FONID, ni para luchar por el salario, al igual que los demás gremios de la mesa intergremial. El cuerpo de delegados autoconvocados no hizo absolutamente nada para desarrollar el paro desde las bases.
Existen escuelas que comenzaron el ciclo lectivo sin personal de maestranza y sin docentes designados, con aulas en mal estado. En el norte, donde los hospitales están colapsados por el dengue, dos escuelas fueron tomadas por las familias debido a su estado calamitoso. Otras han cerrado a mitad de la jornada por las altas temperaturas que se elevan a 50 grados y carecen de agua y luz, exponiendo el fracaso total de la política del gobierno del "calendario regionalizado", que pretende este año hacer trabajar a la docencia los feriados para finalizar el año lectivo en noviembre, antes de que el calor y el dengue hagan nuevamente estragos.
Los ataques de Milei y Sáenz al salario docente se enmarcan en un objetivo estratégico: la destrucción de la educación pública en beneficio de la privada. Operan junto con la burocracia sindical.
Para acabar con este operativo contra el salario y la escuela pública, llamamos a organizarnos por la huelga general, que fue el método histórico que ha permitido a la docencia autoconvocada conquistar y defender sus reivindicaciones.
Por el 100 % de aumento y el salario mínimo y por cargo igual al costo de la canasta familiar. Por la devolución inmediata de lo que se ha recortado del salario, rechacemos la quinta hora, por el cese de las persecuciones, la caída de las causas armadas a los 19 docentes, los intentos de cesantías y por el derecho a huelga paga, sin descuentos salariales por el ejercicio de ese derecho constitucional. Por el cierre inmediato de las escuelas ante casos de dengue y falta de personal de maestranza.