Los trabajadores de Ciencia y Técnica paramos el 23 y marchamos junto a las universidades

Escribe Sergio Saravia

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Luego de la última tanda de despidos, el CONICET se ha teñido de una bronca que recorre los pasillos de cada instituto. Este ataque se suma a los recortes en las becas doctorales, los congelamientos en los pase a planta, la persecución a las investigaciones en ciencias sociales y la asfixia presupuestaria que amenaza con dejar fuera de funcionamiento las entidades ejecutoras.

Esta bronca viene siendo canalizada con asambleas en cada lugar de trabajo, los cuales muchas veces son las universidades que hoy se encuentran en un verdadero estado de ebullición política. Es en estas asambleas donde se han votado distintas actividades relacionadas con enfrentar los despidos y en las ultimas semanas han reafirmado su participación en la movilización convocada desde las universidades. Es así que investigadores, técnicos, becarios y administrativos se han plegado a las acciones de lucha y visibilizan de los problemas que atañen a sus organismos desde abrazos, festivales y piquetes.

Las direcciones de ATE CONICET y UPCN se han largado a la tarea de contener el conflicto con acciones aisladas de desgaste, concentraciones en el Polo científico que no llevan a ningún lado y lo que es todavía peor, han burocratizado la pelea por la reincorporación de los despedidos tejiendo un barrera entre estos y sus compañeros de trabajo. Ni que decir que no han organizado un solo lugar de trabajo. Los trabajadores le han dado la espalda a estas direcciones, hace tiempo, y más aún en momentos tan sensibles cómo estos al ver el nivel de maniobra y desgaste que generan. Las concentraciones convocadas por los sindicatos son cada vez menos concurridas en contraposición con la masividad de las asambleas y la participación altísima que se espera en la movilización del 23 sin siquiera haber un paro formal llamado por los sindicatos.

Así hemos llegado a un escenario en el que las asambleas de CyT han votado movilizar el 23 y convocar en muchos casos a acciones previas en sus lugares de trabajo, como el abrazo del MACN, intervenciones artisticas como en el IBYME o aguantando las vigilias en las facultades. Todo esto muestra un levantamiento que sobrepasa la contención de la burocracia sindical, que declarandosé en estado de alerta y movilización (ridículos) no han movido un pelo por propiciar un levantamiento de los trabajadores de CyT. Han sido las propias asambleas de base la que llamaron a coordinar los lugares de trabajo, como en el caso de CABA donde hay en desarrollo una coordinadora de CyT que convoca a armar una columna única de CyT bajo las consigna, abajo los despidos, recomposición salarial y cumplimiento de la ley de financiamiento de CyT.

El 23 puede llegar a ser un día histórico, la cabeza de la movilización (CIN; FUA; FUBA,etc.) está siendo sobrepasada, aún así no pueden darse el gusto de levantar la movilización aunque el gobierno haya ofrecido una partida extra de dinero para el mes entrante. Capitalicemos el descontento popular con asambleas de base en cada lugar de trabajo e impulsemos los reclamos para preparar las condiciones de una huelga general hasta que caiga el gobierno.

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