Clínica Provincial: exigimos el pago de todas las deudas salariales y el respeto del Convenio Colectivo de Trabajo

La Clínica Provincial de Merlo a finales de enero de 2024 despidió a 80 trabajadores, algunos de ellos con enfermedades crónicas y con hijos discapacitados a cargo. La patronal “justificó” los despidos masivos en la supuesta “inviabilidad” de la empresa y la “crisis financiera” que atravesaba, la que nunca demostró ante los trabajadores abriendo los libros contables para determinar, entre otras cuestiones, adónde están los jugosos subsidios provistos por el gobierno de los Fernández/Fernández y de Kicillof, en pandemia y pospandemia, para abonar los salarios que fueron pagados parcialmente.

En la actualidad, a seis meses de los despidos masivos, los dos tercios del plantel obrero que quedó hace el trabajo que hacían los despedidos y, además, la patronal los obliga bajo amenaza de despido a realizar tareas por fuera de sus categorías y a hacer horas extras en negro, todo ante la mirada cómplice de la dirección de ATSA zona oeste.

Por otra parte, la patronal aprovechó a fondo la desregulación del sector de salud impulsado por Milei y aumentó los valores de atención, estudios, prestaciones y cobra copagos en casi todos los servicios que corresponde a la salud para su diagnóstico como laboratorio, radiología, internaciones y estudios de alta complejidad. O sea, el afiliado de las obras sociales paga dos veces para resolver su problemática de salud: aporta a su obra social todos los meses y, si usa el servicio de salud, abona copagos que se indexan por inflación.

El verso de la “inviabilidad” de la empresa fue sencillamente eso: un verso, porque la Clínica revienta de trabajo: pisos y camas de internación repletas, guardia de adultos repleta y lo mismo sucede con otros servicios (como laboratorio). La patronal está remodelando el segundo piso para transformarlo en un servicio de internación vip que, por supuesto, tendrá precios más altos para los pacientes que sean de obras sociales o medicina prepaga. Como consecuencia del aumento de trabajo la patronal procedió a contratar personal bajo la modalidad de monotributo, implementando de hecho la nefasta Ley de Bases.

Otro dato no menor en esta situación es que la empresa todavía no pagó los salarios adeudados a los despedidos y tampoco pagó las indemnizaciones que marca la Ley de Contratos de Trabajo.

En síntesis, los compañeros que están trabajando cada vez trabajan más y las ganancias de la empresa aumentan. A pesar de la intensificación de la explotación, los trabajadores siguen cobrando su salario en cuotas y les deben los aumentos paritarios 2023, los aumentos paritarios ya homologados por la Secretaria de Trabajo y una nueva deuda que sería el SAC junio 2024, ítem que los compañeros todavía no tienen novedades de cobrarlo.

Por eso, los congresales despedidos que peleamos por nuestros puestos de trabajo seguimos en contacto con los compañeros desocupados y con los compañeros que hoy trabajan en esta empresa para estar unidos y seguimos reclamando el pago de los salarios en tiempo y forma, el pago de todas las deudas salariales, el respeto del Convenio Colectivo de Sanidad, la reinstalación de los despedidos que siguen peleando por los puestos de trabajo y por el pago de todas las indemnizaciones según la LCT.