El viernes 8 marchamos por la huelga general

Escribe China Rivas

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La jornada del 8M cobra vital importancia por el ataque a las condiciones de vida que el gobierno está ejecutando mediante el DNU 70/2023, y una desvalorización fenomenal de los salarios y jubilaciones que han llevado a una caída del consumo que supera del 27% en febrero respecto al mismo mes del año pasado. Alimentos y medicamentos encabezan el ranking.

El brote de dengue en los barrios a causa del abandono de los barrios populares, ha provocado una crisis en el ya desbordado hospital público, donde prima la falta de insumos y personal. Las obras sociales van en retroceso, en muchos casos como IOMA el copago es regular y en el caso de la salud privada se torna cada vez más inaccesible con aumentos mensuales.

Este es el contexto del 8: un saqueo al bolsillo descomunal y el disciplinamiento a mujeres y disidencias por medio de la violencia y abusos sin respuesta por parte del Estado, haciendo de lucha un día en el que nos vemos en la necesidad de tomar decisiones que no queremos: dejar de tener hijos por no poder alimentarlos o permanecer con la pareja violenta por falta de ayuda estatal de vivienda. La ofensiva social del gobierno propone reducir a la mujer al despotismo patronal del hogar y el cuidado de personas.

A esto nos enfrentamos todos los días las trabajadoras y disidencias cuando no podemos acceder a anticonceptivos gratuitos y a la salud sexual, ni a la vivienda ni llegar a fin de mes. La lucha como cuerpos vulnerables que salimos a la calle por ser los más golpeados por el Estado. Garantizar la ley del aborto legal seguro y gratuito así como anticonceptivos y educación sexual científica, los medicamentos para enfermedades crónicas, etc. son prioridad. La protección frente a violencias y la vivienda. La alimentación balanceada y el trabajo.

Hoy nucleadas en autoconvocatorias, asambleas y de manera independiente, las mujeres y disidencias salimos contra el DNU y la guerra social planteada por el Gobierno, el protocolo represivo para cuidar la política de buitreo. Sin esperar al sindicato, las trabajadoras van a la lucha. Las jubiladas se nuclean en las convocatorias locales haciendo carteles y cortando rutas. Las personas trans y discapacitadas nos ponemos de pie por el cupo y contra los despidos. El viernes vayamos los y las trabajadoras a la plaza con las banderas de la huelga general.

LEER MÁS:

Por un 8 de Marzo de lucha contra el gobierno golpista y contra la guerra y la barbarie del imperialismo mundial Declaración de Política Obrera, 03/03/2024.

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