La CGT no para por la paritaria de la UOM, ni por la del SUTNA, ni por ninguna
Escribe Pablo Busch
Furlán da la espalda a la huelga con la ocupación de las plantas.
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El paro convocado por la CGT tiene el objetivo declarado por los convocantes de presionar a los senadores para “que no voten la Ley Bases”. Como es de conocimiento público, el contenido de la ley, especialmente la reforma laboral, ha sido consensuado hace pocos días entre el Gobierno de Milei y la burocracia. En caso de modificarse en el Senado, Diputados la ratificaría con los votos de la primera votación.
El paro de la CGT está asociado a reclamos ‘nacionales y populares’ de la propia patronal. En particular, algo que fue el eje de los discursos del acto del 1° de Mayo, expresa el rechazo de la industria a la apertura de las importaciones de bienes finales y a los beneficios impositivos a las grandes inversiones, que admite la importación indiscriminada de bienes de capital (RIGI). La CGT actúa como un canal de expresión de posiciones proteccionistas; los trabajadores van de furgón de cola de intereses patronales.
Por eso no está dentro del programa del paro quebrar la política del gobierno y las grandes patronales en la paritaria testigo de los trabajadores siderúrgicos, que vienen cobrando los mismos salarios desde noviembre, sin llegar a un acuerdo paritario. Según reflejó Infogremiales, “En la última reunión de mesa chica de la CGT, el propio Furlán hablaba de lo trascendente que es este conflicto para el futuro del movimiento obrero. Si la UOM puede quebrar la resistencia de Rocca podría empezar a marcar un rumbo. En cambio, si la UOM pierde se acentuaría la sensación de «imbatibilidad» que quiere imponer el Gobierno.” Pero Furlán viene marcando el paso en el mismo lugar desde hace seis meses. Una auténtica dirección obrera habría combinado el paro general con una huelga con ocupación de fábrica de la UOM
Una “encuesta” para levantar el conflicto
En los congresos de delegados que se están llevando adelante en las seccionales siderúrgicas de la UOM (San Nicolás, Campana, Villa Constitución) el mensaje de la Comisión Directiva es contundente: no hay ninguna posibilidad de que la UOM convoque un paro por tiempo indeterminado. Después del paro de 72 horas y las movilizaciones masivas a las plantas siderúrgicas, Furlán ya había planteado en el Congreso de San Nicolás que había que “ser inteligentes” y evitar una confrontación de fondo. Pura sabiduría.
La última oferta patronal es un aumento diez puntos a la baja respecto de la inflación del periodo que va de diciembre a marzo. El reclamo de la UOM es que se compense la inflación, que fue del 90%. La oferta de Techint es 80%, aunque no se sabe con qué esquema de cuotas. Acindar ya se comprometió a que una vez firmada la paritaria nacional compensará internamente la diferencia del acuerdo con la inflación.
La extorsión de la crisis industrial
Descartada la profundización del conflicto por la UOM, Furlán impulsará una encuesta nacional en las siderúrgicas para que los trabajadores decidan si se acepta o se rechaza la propuesta patronal. Es claro que frente a una dirección que no inspira confianza para ir a fondo, los trabajadores están forzados a aceptar el arreglo. Furlán no quiere ir a ninguna lucha más: la encuesta es una burda maniobra para aceptar la paritaria a la baja, trasladándole la responsabilidad a los trabajadores.
Las patronales hacen hincapié en la baja de la demanda para forzar los trabajadores a aceptar. La industria metalúrgica afronta un escenario de suspensiones, reducciones de personal, adelantamiento de vacaciones, etc. Acindar anunció una nueva paralización productiva completa para los próximos meses. En un escenario así, cualquier medida de lucha a fondo de los trabajadores debe empezar por la ocupación de las fábricas. Una patronal sin apuro por la producción no enfrentará del mismo modo una huelga que la ocupación de sus fábricas. La lucha se transformaría en política, contra el gobierno y sus secuaces patronales
Una política general
La política testigo de la paritaria siderúrgica se replica ahora en las paritarias de todos los sectores: la patronal del neumático ofrece 0% de aumento salarial, las alimenticias firmaron a la baja sumas de un dígito mensual, incluso la Bancaria firmó un acuerdo a la baja.
Un paro nacional por los intereses de los trabajadores debe empezar por un programa para quebrar las paritarias a la baja, empezando por la de la UOM, pero también las del SUTNA, la UTA en incluso la de Camioneros.
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