Paritaria de docentes universitarios: rechacemos la oferta ruinosa del gobierno

La reunión paritaria realizada el pasado lunes 6 ha sido una verdadera afrenta a los docentes universitarios y preuniversitarios.

Para cerrar la paritaria de 2022, el gobierno propuso un 2,8 % a cobrar en el mes de marzo, para el período que va de 1 de febrero de 2022 al 28 de febrero de 2023. Tanto el gobierno como la burocracia que firmó inmediatamente ese cierre, sin ningún tipo de consulta a sus bases (Fedun, Conadu, Fagdut, Ctera), plantean que el aumento global durante ese período habría sido del 96,8 % y que estaría dos puntos por encima de la inflación. Es sencillamente FALSO. Por un lado, la inflación acumulada de febrero de 2022 a febrero de 2023, según las propias cifras oficiales, se aproxima al 110 %, por lo que objetivamente ha habido una pérdida salarial. Además, mientras la inflación fue acumulativa, las cuotas de la paritaria se calcularon sobre el salario inicial de febrero de 2022, por lo que la pérdida es todavía mayor. Si a esto se le añaden las paritarias a la baja que se vienen aplicando desde 2015 en adelante, el retroceso salarial acumulado por la docencia universitaria y preuniversitaria es mayor al 30 %. En este marco, el 2,8 % acordado por la burocracia y el gobierno es una gota en el desierto de un ajuste general, que además tira deliberadamente abajo la base de cálculo para la paritaria 2023.

Partiendo de esa base deprimida, el ofrecimiento realizado para este año se inscribe por completo en el plan Massa del tope salarial del 60 %, cuando las estimaciones inflacionarias para este año ya superan ampliamente esa cifra. El gobierno planteó para la primera mitad de 2023 un 30 % en tres cuotas no acumulativas (16 % en marzo, 7 % en mayo y 7 % en junio) y una nueva revisión en el mes de junio. Es un porcentaje levemente menor al de CTERA, reafirmando una línea que parece haberse hecho costumbre en los últimos años respecto de que los docentes universitarios y preuniversitarios tengan la PEOR paritaria del sector público. Esta oferta ha sido embellecida por un incremento otorgado en la Garantía Salarial, que es una suma no remunerativa que beneficia a las categorías más bajas de la docencia, con escasa antigüedad. Aunque este último incremento pueda sonar tentador, la docencia no debe dejarse engañar. De esta manera, el gobierno profundiza el deterioro del nomenclador, achatando la diferencia salarial entre los diferentes cargos docentes, y convalida las cifras “grises” que no son tenidas en cuenta para las cargas sociales, perjudicando especialmente a los jubilados universitarios. Hay que decirlo claramente: la Garantía Salarial no debería existir, sino que TODOS los incrementos salariales deberían computarse sobre el básico, respetando el nomenclador.

Otros reclamos acuciantes de la docencia universitaria y preuniversitaria, como la eliminación del impuesto a las ganancias aplicado a los salarios, el salario para los ad honorem, el refuerzo presupuestario a las obras sociales, el pago de la deuda del FONID o el incremento para los docentes jubilados, simplemente no fueron escuchados y no hay novedades al respecto.

La burocracia sindical se apresta a firmar este nuevo ajuste contra la docencia el viernes 10/3 por la tarde, cuando vence el plazo previsto para aceptarla o rechazarla. Conadu Histórica realizará un Congreso ese mismo día para definir su postura. Algunas de sus asociaciones de base ya se han manifestado por el rechazo y por el no inicio del ciclo lectivo (por ejemplo, ADIUNT, AGD, Sitradu) y otran lo están debatiendo en estos días. Es necesario avanzar en esa orientación y convocar a las bases de las otras federaciones a sumarse a este planteo, para romper el techo salarial del gobierno y la burocracia. La destrucción de los salarios es un eje vertebral del ajuste fondomonetarista, junto a la reforma laboral y previsional. Contra este ataque brutal a las condiciones de vida y de trabajo de la clase obrera, vamos por el no inicio en las universidades e impulsemos la organización y la lucha unitaria de los trabajadores.

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